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“Primero les doy la bienvenida una vez más a Washington D.C. en una semana muy interesante. Obviamente, todos estamos viendo lo que está pasando a nivel global y específicamente en el Medio Oriente. Y a la misma vez, todo el drama de lo que está pasando en la Cámara de Representantes, lo cual no tiene nada que ver con nosotros acá en el senado de EE.UU. 

“Les toca este año, como siempre, un tema de gran importancia y creo que lo que están haciendo es bien importante. Creo que aquí reunidos con nosotros tenemos, si Dios quiere, futuros líderes de países en nuestra región, incluso presidentes. Los presidentes de América Latina,  en nuestro hemisferio, hoy en día son mucho más jóvenes que yo.  Nunca podría haber dicho eso antes. Es importante porque hay dos cosas que amenazan la democracia en la región en este momento. La primera es el deseo al poder. Y desafortunadamente, o como siempre hemos visto a través de la historia, hay algunas ideologías que no son compatibles con la democracia. La democracia requiere que el gobierno responda a las necesidades de un pueblo. ¿Entonces, qué pasa cuando uno entra al poder prometiendo muchas cosas? Todos los políticos prometen, pero en ocasiones  no dan resultados, no hay crecimiento económico, no hay oportunidades.

“Por ejemplo, como vimos en Venezuela, con las promesas que hacía Hugo Chávez, era muy popular y él se aprovechó de esas divisiones en la sociedad económica: los ricos en contra de los pobres, como siempre hacen personas de tendencia marxista. Siempre sugieren, ‘vamos a quitarles y vamos a darle a los demás’. Pero eventualmente lo que pasa es que ese sistema no funciona, no ha funcionado en Cuba, no funcionó en la Unión Soviética. ¿Entonces, cómo mantenerte en el poder, si no puedes crear apoyo popular? Cómo estamos viendo en Nicaragua, el pueblo no puede ir a una elección legítima porque el régimen de Ortega-Murillo pierde. No puede haber una elección legítima en Venezuela, porque Maduro pierde. Y no solamente pierden el poder, pero posiblemente él y miembros de su narco-régimen irían  presos o serían sancionados, porque se encuentran en una situación en la cual han tenido que cometer tantas atrocidades, han tenido que cometer tantos delitos que es imposible salir del poder. Entonces lo que hacen es empezar a atacar las instituciones. 

“Tradicionalmente, en el pasado, habíamos visto a las dictaduras que existían declararse abiertamente como un dictador. Hoy en día, lo que hemos visto son personas que llegan al poder, a veces a través de una elección legítima y empiezan a desmantelar todas las instituciones democráticas de un país.

“En el caso de Venezuela leímos hoy que la Administración Biden le va a quitar sanciones al narco-régimen por seis meses porque Maduro ha prometido tener elecciones libres y democráticas. Primero, eso es imposible. Maduro jamás puede entregar el poder ni jamás conducirá una elección en las que vaya a tener la menor posibilidad de perder

“Una elección en la cual la candidata que tiene más posibilidad de ganar se le ha impedido aspirar al poder. No es una elección legítima, pero desafortunadamente, hay personas que quieren la estabilidad de la región tanto que están dispuestos a caer en esos engaños y estas trampas que crean los dictadores, aunque sea la percepción de democracia. En el caso de Nicaragua es aún peor todavía. Encarcelaron no a uno sino a todos los precandidatos opositores. Persona que se lanzaba a la presidencia iba preso. En muchos casos han sido liberados o han tenido que abandonar el país. El régimen ha atacado a la Iglesia católica y a las instituciones del país. Ese ataque contra las instituciones que estamos viendo es como un nuevo modelo. No lo vemos en el caso de Cuba porque ha sido un régimen establecido que tiene su sistema, que no ha sido democratico por mucho tiempo. Pero ese es el plan que hicieron en Venezuela y ese es el plan que hemos visto también en Nicaragua. Así que, siempre estamos pendientes de eso. Esto es una tendencia de personas de ideología que no funciona, apoderarse del gobierno de un país a través de métodos antidemocráticos con el objetivo de eliminar la democracia para mantenerse en ese poder.

“La segunda amenaza que ha incrementado en los últimos años es el anhelo de tener seguridad y estabilidad. Y eso uno tiene que entenderlo hasta cierto punto. Todo el pueblo desea eso y incluso ha movido algunas tendencias de esa manera en este país también. Es la tendencia decir– hay tanta criminalidad, hay tanto desorden, hay tanta violencia, hay tantas amenazas que lo que hace falta es una mano dura y una mano fuerte. Yo, hasta cierto punto, creo que eso es correcto. Hay que hacerlo y en algunos casos es una emergencia hacerlo. Pero siempre hay que tener cuidado con eso para que no se convierta en una excusa para crear dictaduras y un estado autoritario permanente. Creo que eso siempre es una amenaza a largo plazo en algunos lugares y por eso hay que proteger la democracia. A veces requiere la defensa– no simplemente de un proceso, sino de las instituciones que hacen eso posible y es importante tener personas capaces para saber gobernar en una democracia. Y, les digo, todos los países tienen sus diferentes problemas y desafíos. 

“En el caso de Haití es imposible tener elecciones en la isla. Haití es un país controlado 100% por pandillas en las calles. En este momento, la necesidad número uno que tiene Haití es la seguridad y la estabilidad. Sin esos dos requisitos, no vas a poder tener un gobierno. 

“Mi opinión personal, al ver la manera en la cual se expresa el presidente democráticamente electo de Colombia, le ha hecho un gran daño a la relación de EE.UU., no en términos de la relación con el pueblo colombiano. Sabemos que quienes no están de acuerdo con las cosas que él ha dicho, tienen la esperanza que en las próximas elecciones vaya a haber un cambio. También existe la rama legislativa, una rama judicial independiente y una prensa libre que puede criticar la gestión del presidente Petro. Así funciona la democracia y a veces en la democracia salen líderes electos con quienes yo no simpatizo en términos de política. En algunos casos toman posiciones contrarias a los intereses de EE.UU. pero yo no los acusó de dictador, los acusó de estar equivocados, y los acusó de ser peligrosos. En el caso de Argentina, van a tener elecciones. Espero que venga un buen líder nuevo que no sea hostil a los intereses o la relación con EE.UU. 

“La función que ustedes hacen es más importante hoy que lo que era hace cinco años. No sé por cuánto tiempo más esté aquí en el Congreso, nos quedan cinco años. Veremos después, pero posiblemente si yo no estoy aquí, los estaré mirando y leyendo. Algunos de ustedes van a regresar un día como presidentes, vicepresidentes, ministros, embajadores de sus países natales o en otros roles. Esa es la esperanza que tenemos. Que existen, en esta generación,  jóvenes en todo el hemisferio comprometidos con las ideas de la democracia. Comprometidos con los ideales de proteger estas instituciones, crear un hemisferio de democracia, incluso en esos países que hoy no gozan de ello. Que los pueblos de los países que no tienen democracia puedan mirar a otros países e inspirarse que sí es posible vivir en una sociedad estable, segura, próspera y democrática. 

“La democracia es difícil, no es fácil porque es una sociedad abierta. Todas las discusiones, todas las diferencias se discuten en público y parece como si fuese una debilidad. Pero lo realmente débil no es cuando tenemos la habilidad de discutir abiertamente, de tener diferencias. La debilidad viene cuando no existe esa posibilidad.

“Termino con esto. Si uno va a la frontera de EE.UU. en cualquier día y cuenta las personas que están cruzando, vienen de todas partes del mundo y por muchas razones. Pero, la enorme mayoría vienen de Venezuela, desafortunadamente, trágicamente y en algunos meses de Cuba. Dos países donde no hay democracia. Personas que abandonan los países porque no ven esperanza que algo va a cambiar y no existe la manera de cambiarlo, no existe la posibilidad, no hay elecciones, no hay manera de poder cambiar el sistema y tienen que abandonar el país. Eso crea e incentiva a una crisis migratoria, como la que hemos visto. La enorme mayoría de personas que han venido, por ejemplo a EE.UU. desde Venezuela no tenían ninguna intención en venir hace siete o diez años. 

“Esa migración es el futuro de cualquier país y muchos no van a regresar porque van a empezar su vida en otro lugar, se van a establecer. Eso debilita y acaba con el futuro de un país porque estás perdiendo tu futura generación. Digo eso solamente por lo siguiente, aquí, obviamente estamos enfocados en los temas norteamericanos. Pero la razón por la cual nos debe importar la democracia en la región es porque cuando no hay democracia eso crea una crisis migratoria que impacta a EE.UU. 

“Les agradezco mucho esta oportunidad. Me alegró mucho de verlos aquí una vez más. Posiblemente la próxima vez tendré que decirle a alguien señor o señora presidente”.